EL CAPITULO DE HOY SE TITULA: “TE VOY HACER LOS CALZONES COMO LOS USA EL RANCHERO… TE LOS EMPIEZO DE LANA TE LOS TERMINO DE CUERO”
Anthony escuchaba detenidamente a su nueva novia, en medio de muchas lágrimas y sollozos Candy – Candy le contó todo lo que había sucedido.
CANDY – CANDY: “Y es por eso che querido que tome finalmente la decisión de irme, irme bien lejos de esta ciudad que solo me ha traído desgracias… Salvo vos claro está… Que eres la única persona que me ha sabido comprender y sobre todo me has sabido querer Anthony… Con todo el dolor del mundo me voy… Me devuelvo a Guasipati”
ANTHONY: “Pero ya va, un momento Candy – Candy… No puedes tirar todo por la borda tan solo por un tropiezo… ¿Y lo nuestro?... ¿Dónde quedo yo?... Le había apostado mucho a esta relación… Imagínate que ya contaba con ir a conocer a mis suegros… Me había hecho la ilusión de conocer por fin a la mamá de Tarzan… O sea, a la mamá de Tarzan pecosa”
CANDY – CANDY: “Lo mismo digo loco… Pero ya perdí todas las esperanzas… No veo por ninguna parte una solución viable a este problemón que tengo encima… Lo último que quiero pedirte querido Anthony es que cuides de mi fiel CLIN… Al igual que a vos, lo voy a extrañar demasiado.”
ANTHONY: “Ya va, ya va, ya va… Un momento… ¿Dijiste CLIN?... Si mal no recuerdo, ¿Tu conseguiste a CLIN en la Facultad de Medicina gracias a que logró escaparse de la Cátedra de Técnicas Quirúrgicas donde le pensaban dar chuleta verdad?.”
CANDY – CANDY: “Si che… ¿Pero que tiene que ver eso con mi expulsión?”
ANTHONY: “Shhhhh… Shhhhh… Silencio Tarzan pecosa… No digas nada y acompáñame de inmediato que creo tenemos una pequeña luz de esperanza… Vamos… Vamos rápido que casi no queda tiempo.”
Anthony y la sufrida Candy – Candy salían como alma que lleva el diablo rumbo a la finca de los padres del chico, ¿Su misión? buscar al noble CLIN, ¿Con que objetivo? Sabrá Pepe, en este caso sabrá Anthony.
Dios mío que nervios, vamos a dejar por un momento al par de tórtolos y dirijamos nuestra atención hasta el Rectorado de la Universidad, está a punto de comenzar el Consejo Universitario de hoy, ya todos los Consejeros y autoridades están en sus curules, toma la palabra el honorable Rector.
RECTOR: “Muy buenos días distinguidos representantes universitarios… Vamos a dar inicio al Consejo de hoy… A continuación los puntos en agenda a discutir según su orden: Primero está el tema de si por fin vamos a reiniciar las clases o no… El señor Gobernador me ha sugerido que las dejemos para Enero… Segundo está el punto referente a si vamos a incluir las tajadas en el pabellón que se sirve en el comedor… Tercero está el premio record Guines que se le va a dar al bachiller Alfredo Rodríguez por haber superado los 37 años que duró el Fantasma para graduarse… Y por último tenemos el caso de la bachiller Candy – Candy Marcano Camacaro, que la agarraron con las manos en la masa chuleteandose durísimo en pleno parcial de Fisiología… Dicho esto damos inicio al Consejo Universitario de hoy”
Oh no, por lo visto a la pobre Candy – Candy ya la tenían en salsa, si en el Consejo Universitario determinaban que era viable su expulsión, ya no habría vuelta atrás, la apelación sería más inútil que el semáforo del Mercado Periférico, así que toda la apuesta estaba centrada en lo que pudiesen hacer el par de chicos en los próximos minutos… Pero, ¿Dónde diablos están? ¿Por qué tardan tanto?
Anthony acelera a todo lo que le da el motorcito de su carro, ya habían buscado a CLIN y ahora tomaban la ruta hacia la Facultad de Medicina.
CANDY – CANDY: “Che por favor… Decíme de una buena vez que tienes en mente… ¿Por qué hemos buscado a CLIN?”
ANTHONY: “Muy fácil… Según lo que me has contado, el esténcil del examen que te sembraron fue introducido en tu bolso en algún momento mientras estabas en la Facultad… Por las deducciones que hemos sacado fue Albert quien lo metió al momento de abrazarte… Ese esténcil indiscutiblemente salió del departamento de Fisiología… Así que alguien de ahí adentro fue quien se lo facilitó… Ahí está la clave, conseguir a esa persona que sustrajo el esténcil de la Cátedra… Y bueno… Quien mejor que CLIN para conocer de cabo a rabo la Facultad, su extraordinario olfato nos va a llevar hasta la persona que estamos buscando”
Al llegar a la facultad Anthony tomó el bolso de Candy – Candy y se lo puso a CLIN en toda su trompa, batiendo la colita el noble can empezó a echarle nariz desesperadamente.
CANDY – CANDY: “Vamos CLIN… Huele bien y dinos que persona de esta Facultad fue la que tomó por primera vez ese esténcil que tenía en mi bolso”
Aunque parezca mentira el plan de Anthony empezaba agarrar forma, el perrito se desesperaba y haciendo gestos de todo tipo le indicaba a su ama por donde debían seguirlo.
Lo que más les llamó la atención fue que, contrario a lo que creían, no tomo rumbo a la Cátedra de Fisiología… No…. El famélico cacri dirigía sus pasos a la garita de vigilancia de la Facultad… Pero ¿Por qué para allá?… Ahí lo vemos… Desesperado, despeinado y ladrándole como loco a Reinaldo Toñeco… El guachimán del turno de la noche que cuidaba la Facultad.
