DE MENDIGO A MILLONARIO

CAP XV


Con los ojos en blanco, la lengua asomada por una de las comisuras de sus labios y sin respirar, el golpeado cuerpo de Yorsua yacía en una orilla al lado de la súper transitada Avenida Las Américas. Sus más fieles compañeros del clan de perros cacri lo lloraban, lo olfateaban y le lamían por todas partes para ver si reaccionaba, pero nada… Yorsua seguí tendido, su inanimado cuerpo indicaba que algo muy malo le había pasado, tal vez lo peor…

PELUCHE: “Muchachos… Snif, Snif, Snif… Yo se de cómo hacer para que el jefe reaccione… Si hay algo a lo que él no se puede resistir es a esto: ¡Jefeeeeeee… Mireeeeee… Allá hay tres perritas en celo… Vamooooossss!!!"

Nada, el magnifico plan de Peluche no dio resultado, Yorsua, a quien sus compañeros confundían con Pelusa, no daba muestras de vida.

Aquella reunión de perritos alrededor del maltratado cuerpo de su jefe, llamó la atención de varias personas que circulaban a pie y en carro a esa hora por la Avenida Las Américas, entre estas se encontraba la noble Irina Masini, reconocida locutora de la ciudad y que en sus ratos libres se dedicaba a cuidar animalitos de todas la especies, al ver aquel dramático cuadro se acercó para ver en que podría ayudar.

IRINA: “Cónchale… Pobre perrito vale… Lo pisaron y lo dejaron ahí tirado… ¿Será que si me lo llevo praa la casa mi mamá no se molestará?… No, no, no… No puedo… Ya bastante he fastidiado con el poco e’ flores chinas navideñas que metí en mi cuarto… Ay ya se… Ya se a donde lo voy a llevar

Debemos reconocer que almas caritativas como esta nacen una vez cada mil años, ante la mirada dolorosa de los otros perritos callejeros, Irina Masini levantó al maltrecho Yorsua y lo llevó hasta su vehículo para luego trasladarle hasta un lugar que solo ella conocía. Al quedar solos, una vez más tomaba la palabra el pequeño Peluche, aquel perrito mestizo que alguna vez perteneció a nuestro compañero de labores Flavio Guerrero y que se le escapó por estar llevándolo a trotar al Metropolitano.

PELUCHE: “Bueno compañeros… Nuestro líder ha muerto… Si algo nos inculcó Pelusa cuando estaba vivo… Fue que por encima de todo siempre estará la banda… Así que propongo que elijamos un nuevo líder… Alguien que nos represente dignamente y nos sepa orientar por el camino del chorizo parrillero y los pellejos de carne gorditos

Todos estuvieron de acuerdo con Peluche, de inmediato procedieron a votar, cada uno dejó marcada su patita en aquellas papeletas que luego introdujeron en las urnas electorales, que en este caso era potes vacío de leche de cartón, al terminar el proceso de votación, procedieron a realizar los escrutinios.

PELUCHE: “Compañeros y compañeras… Perros y perras… Mestizos y mestizas… Con garrapatas y garrapatos… Habemus Papa… Cof, cof, cof… Digo… Estamos aquí reunidos para determinar quien fue elegido como el nuevo líder de la banda… Después de hacer el conteo y ya con una tendencia irreversible… El nuevo jefe se llama: ¡PIRAÑA!!!"

Efectivamente, Piraña, aquel enorme perro tuerto, mitad mucuchicero, mitad doberman con algo de salchicha, se convertía en el sucesor del ya desaparecido Pelusa… Se levantaba entre sus compañeros y tomaba la palabra.

PIRAÑA: “Muchas gracias por la confianza depositada en mí queridos compañeros… No vengo aquí con discursos cansones sobre promesas de igualdad de clases, socialismo leninismo, ni nada de esas necedades… Vengo aquí con una propuesta directa, sencilla y práctica… Debemos vengar la muerte de nuestro gran Pelusa… Debemos buscar hasta debajo de las piedras al culpable y ese no es otro que aquel perro que vimos en la tolva de la camioneta azul que nuestro jefecito empezó a perseguir como loco… Ya dispuse de un equipo multidisciplinario de rastreadores que nos van a decir donde vive el pajarito ese… Cuando lo ubiquemos nos vamos hasta su casa y allá arreglamos esta culebra… ¿OK?

Oh no, que horror… ¿Sabrá el verdadero Pelusa que sus propios ex compañeros le están preparando una pildorita de Mc Klaud?... Vamos a ver que está haciendo a esta hora el pastor alemán gemelo del desaparecido Yorsua, nos referimos a Pelusa Ramón.

Urbanización El Mono Jojoy, Quinta Helmintos, área del gimnasio… Ya Pelusa, a quien confunden con Yorsua, ha tomado su reparador baño de la tarde, luego de un día tan ajetreado, recibe un completo masaje anti estrés de parte del mayordomo de la mansión Ruperto, mientras le aplican aceites relajantes piensa:

PELUSA: (Pensando) “Cónchale que chimbo… Creo que ese al que atropellaron era el verdadero perro que pertenece a este estilo de vida… Pa’ mi que le dieron chuleta… ¿Y ahora que voy hacer?... ¿Será que estoy condenado a quedarme aquí para siempre?... Con estos baños de piscina… Masajes anti estrés… Comida de primera… Viajes por todo el mundo… Collares con diamantes incrustados… Y mis nuevas amistades del Country

Pelusa seguía pensando cuando de repente escuchó la voz de su ama, nos referimos a Doña Respingada de Eslava.

DOÑA RESPINGADA: “Yorsua… Yorsua… Yorsua Molto von Berger Swahsteiger Primero… Ven acá… Tienes visita mi campeón”

Efectivamente acababa de llegar a la Mansión helmintos la bella Cinderella, aquella perrita que traía de cabeza al verdadero Yorsua… Cuando Pelusa la vio, solo atinó en decir:

PELUSA: “Aaaaaayyyy papá… Se armó un limpio… A esta niñita no la pelo ni con arroz chino