
CAP II
Hace ya algunas horas que partió desde el lejano planeta Compton, con destino a la Tierra, la súper avanzada nave espacial La Zamura 1, en su interior viajan dos soldados comptonianos que fueron asignados para la importante misión de preparar el terreno para una eventual invasión a nuestro planeta y de esta manera sustraer los más importantes recursos naturales, entre ellos la preciada agua.
Pero qué tal si conocemos un poquito mejor a este par de seres extraterrestres que llegarán dentro de muy poco a visitarnos, qué tal si aprovechamos esta posición de privilegio con la que contamos y averiguamos qué clase de personajes son ¿Bien?, ¿Si?, ¿Estamos de acuerdo?... Bueno, metamos nuestras narices.
Al primero que vemos es al mismísimo comandante y jefe de la nave Helminto Alfa, Helminto se encuentra a esta hora, como era de esperarse, pilotando su embarcación. Al igual que todos los demás extraterrestres, este es un ser flaquiiito y cabezón, su piel es pálida y medio azulada, tiene dos pepas de ojos gigantescos y un rictus de amargura siempre adorna su rostro. Es extremadamente ordenado, exigente y disciplinado, le gusta que todo marche a la perfección, no deja cabos sueltos para evitar correr riesgos a posteriori y es uno de los más fieles y condicionales elementos con los que cuenta el régimen que gobierna el poderoso planeta Compton, no tiene ni conoce que es el sentido del humor, siempre está serio y no le gusta que nadie a su alrededor ande con chistecitos.
En otro ambiente de la nave, nos referimos al laboratorio, se encuentra el teniente Oxiuro Beta, al contrario de su jefe, el teniente Oxiuro es un extraterrestre más relajado y menos estricto, aunque tiene clara cuál es su labor en la importante misión para la que fueron asignados, este es un comptoniano diferente, ojo, físicamente es como cualquier otro ser alienígena, pero su personalidad varía sustancialmente si la comparamos con la del teniente Helminto. Oxiuro no estaba muy convencido de enrolarse en una nueva misión que le llevaría a tierras tan lejanas, hace poco había comenzado a salir con una linda comptoniana que le traía de cabeza justo cuando fue convocado por sus superiores, como el deber llama y la prioridad en estos momentos es la salvación de su especie, no le quedó otra que terminar partiendo a ese enigmático lugar llamado planeta Tierra.
OXIURO: “Planeta Tierra… Qué nombre tan ridículo para llamar a un planeta… Es como si a Compton lo llamáramos Planeta Bosta por la gran cantidad de desechos que dejan nuestras vacas espaciales… No llevo ni la mitad del viaje y siento que ya detesto a esos terrícolas… Por su culpa tuve que salir de mi casa y alejarme de la linda Tricomona Lamba… Tanto que me costó que me dijera que si y ahora debo separarme… Mejor continúo estudiando a esos humanos… Qué tenemos aquí… Este es el fulano satélite que se les perdió y gracias al cual los vamos a invadir… Tiene varias frases escritas… Hecho en Socialismo… Vivir Viviendo… Pa´lante Comediante… Amor con amor se paga… Uhhhmmmm… Qué interesante… Aquí hay varios registros audiovisuales que han recopilado estos terrícolas y los almacenaron en este obsoleto satélite… Voy a revisar para ver de qué se trata”
Oh no ¿Se dan cuenta queridos amigos oyentes del maquiavélico plan que están llevando a cabo estos horripilantes seres extraterrestres? Silencio… Shhhh… Shhhh… Al otro lado de la nave el comandante Helminto recibe una importante llamada proveniente de su planeta de origen, nos referimos al Planeta Compton.
HELMINTO: “Aquí Zamura 1… Recibiendo contacto interestelar de base de mando… Adelante planeta Compton”
SEMOLA DURUM: “Zamura 1 aquí base de mando Planeta Compton… Le habla la Generala Sémola Durum… Proceda a informar desarrollo de las primeras horas de viaje y novedades”
HELMINTO: “Comprendido mi generala… Hasta hora llevamos velocidad luz de crucero sin novedades… Estabilidad protoplasmática absolutamente normal y preparamos protocolo para captura de primer agujero de gusano que nos pondrá a pocos años luz del Sistema Solar”
SEMOLA DURUM: “Perfecto Comandante Helminto… Recuerde que el lugar de aterrizaje asignado es esa ciudad llamada Nueva York… No sabemos que tiene a ciencia cierta… Pero por los documentales que hemos podido revisar todas las invasiones extraterrestres, cataclismos naturales y dinosaurios gigantes siempre atacan a esa ciudad, así que nosotros no seremos la excepción”
HELMINTO: “No se preocupe generala… Nueva York es nuestro destino… Allí llegaremos y según el plan nos vamos a infiltrar entre los humanos para estudiarlos y así abonar el terreno de la inminente invasión”
SEMOLA DURUM: “Por cierto comandante… ¿Qué está haciendo el teniente Oxiuro que no lo veo?... ¿Dónde se encuentra?”
HELMINTO: “Si mi generala… El teniente Oxiuro está a esta hora en el laboratorio estudiando el satélite terrícola que encontramos… Adelanta investigaciones sobre la cultura y conducta de los humanos”
SEMOLA DURUM: “Muy bien comandante… Me agrada saber que todo está marchando con absoluta normali……”
SEMOLA DURUM: “¿Ahhhh?... ¿Pero qué significa ese extraño ruido?... ¿Qué es ese extraño ritmo desconocido?... ¿De dónde proviene?... No lo soporto comandante Helminto… Haga algo de inmediato”
HELMINTO: “Sinceramente lo lamento mucho mi Generala… Esto debe tener alguna explicación… Voy averiguarlo ya mismo”
Y dejando su puesto de mando en la Zamura 1, el comandante Helminto se dirigió inmediatamente hasta el laboratorio de la nave, de donde provenía aquel enigmático sonido. Al abrir la puerta el jefe de aquella misión quedó paralizado al ver una escena que le heló hasta la última gota de sangre alienígena.
Ahí, sentado en el interior de aquel satélite que decía Hecho en Socialismo, con el equipo de sonido de este a todo volumen, se encontraba el teniente Oxiuro, apretando los labios y con sus enormes ojos cerrados mientras se tomaba el pecho y cantaba con gran pasión, las líricas que salían de aquellas pequeñas cornetas.
OXIURO: “Hicimos una vez… Un pacto sagrado… Que además firmamos… Y luego juramos nunca disolver… Que tú eras para mi… Que yo era para ti… Los dos pa las buenas… Los dos pa las malas por siempre hasta el fin”